¿Qué es una minicuna?

Tal como su nombre indica, se trata de una cuna en miniatura.

Esto no quiere decir que sea sólo para bebés mini o prematuros, este tipo de cunas se han puesto de moda y son ideales para cualquier familia.

En líneas generales, están diseñadas para que el bebé se sienta arropado durante los primeros meses de vida.

¿Cuánto tiempo duermen los bebés en una minicuna?

Para ser francos, la vida útil de las minicunas es corta. Inequívocamente, la minicuna es perfecta para los primeros meses de tu bebé: desde que es recién nacido y llega del hospital hasta aproximadamente los 4 o 6 meses de edad, dependiendo del modelo que compres y las medidas de tu peque.

Aclaramos esto, ya que cada fabricante (por motivos de seguridad) dispone en su manual del peso y altura máximos sugeridos.

Si tienes dudas, puedes aplicar la regla de sentido común (o instinto maternal): cuando tu bebé empiece a sentarse o levantarse por sí mismo, será momento de decir adiós a la minicuna.

¿Cómo tiene que ser el colchón de la minicuna?

El colchón de minicuna debe ser una combinación perfecta, un equilibrio absoluto entre rigidez y blandura.

Verás, ha de ser firme sin tener demasiada dureza que ejerza presión sobre el cuerpo del bebé. Al mismo tiempo, no puede ser muy blando, para evitar que su cuerpo se hunda, garantizando que esté seguro y que no se obstruyan sus vías espiratorias.

Te aclaramos que el tema de la rigidez del colchón no es un capricho. El colchón de la minicuna precisa ser firme para distribuir el peso de tu peque uniformemente y evitar el riesgo de malformaciones en el cráneo (como la plagiocefalia).

¿Cuánto tiempo puede estar un bebé dentro de la minicuna?

Un bebé puede estar en su minicuna todo el tiempo en que logre permanecer allí.

Es cierto que los recién nacidos duermen durante la mayoría del tiempo. Por lo tanto, le darás un uso frecuente a tu minicuna.

Ahora bien, en la medida que vaya creciendo, casi seguro, preferirá pasar tiempo en tus brazos, ya sea para conciliar el sueño, como para alimentarse, descansar o simplemente “estar”.

¿Por qué optar por una minicuna y no por una cuna?

A decir verdad, lo más posible es que termines usando ambas.

Como ya dijimos, la vida útil de la minicuna es corta. Sin embargo, de tener la oportunidad no has de escatimar en el gasto. Lo mejor es que consigas una.

Ten en cuenta que son perfectas si deseas tener a tu hijo en tu habitación, ya que se adaptan a cualquier espacio.

Del mismo modo, son ideales para poder tener a tu bebé 100% al alcance de tu vista, sea que precises estar en la sala, el lavadero, la habitación de un hermanito o mientras trabajas, etc.

La practicidad de la minicuna radica en su tamaño y ligero peso. Con una cuna normal, no podrías hacer eso.

¿Todas las minicunas son iguales?

Definitivamente no lo son. Similares sí, pero no iguales.

Podríamos subdividirlas en 2 grupos: aquellas que se asemejan más a los moisés clásicos y las modernas minicunas de colecho (para adosar a la cama de matrimonio).

¿Entonces, una minicuna es igual a un moisés?

No, igual no. Semejante, sí.

Los moisés llevan asas; las minicunas, no. Además, las minicunas cuentan con una estructura de patas fija. Otra diferencia es que las minicunas cuentan con una mayor profundidad y dimensión que los moisés. Esto claramente se refleja en el peso: las minicunas pesan más.

¿Qué tipos de minicunas existen?

Existen minicunas de colecho, plegables, de viaje, etc.

Teniendo en cuenta que es el tipo de cuna el que favorece el descanso tanto del bebé como de los papás (híper necesario y costoso los primeros meses), has de adquirir aquella que más te guste y te resulte más cómoda.

¿Que tener en cuenta para comprar una minicuna?

Más allá de los gustos personales y el estilo de minicuna que prefieras, hay 4 aspectos indispensables que deberías analizar a la hora de comprar tu minicuna. A saber:

La seguridad del bebé: debes elegir siempre un modelo de minicuna que cumpla con la norma UNE-EN 1130:2020 que se encuentra en vigor actualmente. Esto debe estar especificado en el producto.
Cómoda y lavable: poder desmontar y lavar a máquina las fundas con facilidad es fundamental para lograr siempre la máxima comodidad e higiene para tu peque. No has de pasar por alto verificar que tenga unas buenas costuras, de modo tal que sean totalmente seguras para el bebé.
Colchón: ya hablamos antes del equilibrio en cuanto a su rigidez; sin embargo, otra cosa que has de tener en cuenta, es que sea transpirable, higiénico y que no esté forrado con PVC.
Trasladable y fácil de manejar: te sugerimos que optes por una minicuna que cuente con ruedas para poder moverla de un lugar a otro fácilmente. Eso sí, éstas siempre deberán poseer frenos de seguridad. Otro detalle útil será que las ruedas estén recubiertas de goma, para evitar deteriorar el suelo de la casa y hacer el menor ruido posible al moverla, cuidando el descanso de los peques hipersensibles.

Minicuna de Colecho (71 x 83 cm.) de Bbest

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